Hoy, 28 de enero se conmemoran 102 años de la Hoguera Bárbara, trágico episodio en el que el general Eloy Alfaro Delgado, más conocido en la historia de Ecuador como el Viejo Luchador, perdió la vida junto a sus coidearios.
En reiteradas ocasiones el presidente ecuatoriano, Rafael Correa, ha señalado que la Hoguera Bárbara del ayer se ha convertido en la aurora del presente, y ha enfatizado en la figura de Eloy Alfaro como el principal gestor de profundos cambios en el país.
En el gobierno de Alfaro se terminó la construcción el ferrocarril que une Quito con Guayaquil y se modernizó el ejército ecuatoriano. El Viejo Luchador fue el precursor de la Revolución Liberal, que consiguió separar la iglesia del Estado; la legalización del divorcio, la construcción de numerosas escuelas públicas, la libertad de expresión y la institución del derecho a la educación laica y gratuita así como el matrimonio civil.
Asimismo permitió que los pobres y excluidos se conviertan en ciudadanos, inició la construcción de grandes obras que forjarían la unidad nacional y defendió las libertades de expresión, de imprenta y de palabra que cambiarían para siempre la historia del país.
Esta mañana el presidente ecuatoriano, Rafael Correa, recordó este acontecimiento mediante un mensaje en su cuenta de Twitter: “Hoy muerte de Alfaro. Prohibido olvidar: prensa le decía dictador, prepotente, lo rodearon de mentiras… ¡y encendieron la hoguera bárbara!”.
Eloy Alfaro fue Presidente de Ecuador desde 1895 hasta 1901, y luego por un segundo período, desde 1906 hasta 1911. Fue asesinado en 1912 y arrastraron su cuerpo por las calles de Quito. Relatos históricos señalan que quienes lo mataron obraron obedeciendo los deseos de conservadores acaudalados y agentes de la Iglesia, ninguno de los cuales fue arrestado, procesado o inculpado.
En la actualidad, Alfaro es considerado el responsable de las libertades fundamentales, los derechos civiles y políticos; y el espíritu emprendedor de los ecuatorianos.
Fuente: Andes