Así presentó oficialmente la campaña denominada «Esta es la mano sucia de Chevron» con la que busca evidenciar y mostrar la «verdad» sobres las prácticas petróleras ejecutadas en la zona.
La empresa Chevron funcionó en Ecuador desde 1962 hasta 1999. En 2011, la Corte de Justicia de Sucumbíos, en el noreste de Ecuador, condenó a la petrolera a pagar más de 19.000 millones de dólares.
En su visita el mandatario introdujó su mano para evidenciar como está se llenaba de petroléo, pues la región aún mantiene los residuos en sus tierras.
Correa hizo un llamado a la comunidad internacional para «reaccionar contra tanta impunidad» y solicitó a los ciudadanos no consumir productos de Chevron.