El hecho, que se registró el 24 de junio alrededor de las 8 de la noche, llamó la atención del usuario debido a que el chofer solamente ocupaba una mano para dirigir el autobús, sin importarle el peligro que implicaba su acción. Las autoridades del departamento de tránsito de Nueva York iniciaron una investigación para saber cuántas veces cometió el hecho y buscarán culpar a Simpson, quien perteneció a la institución por 21 años, de imprudencia y arriesgar la vida de los pasajeros.