Continúan las investigaciones sobre la muerte de Luis Molina de 76 años, suboficial segundo en servicio pasivo, quien falleció a consecuencia de una caída por el ascensor del hospital Naval de Guayaquil.
Según denuncia presentada por la familia del ahora occiso, el anciano trabajaba como vendedor ambulante y con esta finalidad ingresó a esta institución, donde se produjo este hecho fatídico, que acabó con su existencia.
De acuerdo a lo que se relata en la denuncia presentada en la Fiscalía, Molina murió en forma violenta, luego de ingresar al elevador de carga e irse al vacío porque la cabina se encontraba en otro piso.
En el informe, se asegura que el ascensor no tenía ningún aviso, que indicara que no estaba en funcionamiento, lo cual no alertó al hombre de avanzada de edad sobre este terrible suceso que terminó con su vida y por lo que sus deudos acusan a los directivos del mocrosomio de homicidio inintencional.
Los ejecutivos del referido hospital se defienden y hasta presentan un video, donde se aprecia como sucedió la tragedia a la que la califican de accidente y mientras tanto, la Fiscalía restringió indefinidamente el uso del elevador.