La introducción de la ceremonia de investidura fue un canto a las esencias de Ecuador con la interpretación del himno nacional por parte de la laureada Paulina Aguirre, ganadora de un premio Grammy Latino en 2009.
Correa, vestido con traje ceremonial y con una camisa con bordados étnicos, contempló con gesto circunspecto el inicio de la ceremonia a la que llegó acompañado de su esposa, Anne Malherbe y de sus hijos Anne Dominique y Miguel desde el Palacio de Carondelet, sede la Presidencia.
La cantante Karla Kanora se encargó a continuación de ensalzar los valores de Ecuador con la interpretación del tema «Ama la vida» ante los presidentes, delegaciones internacionales, autoridades locales e invitados de honor que asistieron al acto.
Todo ello mientras un vídeo proyectaba coloridas imágenes de la salva amazónica, lagos, volcanes, aves, playas y otros paisajes del patrimonio natural ecuatoriano.
El colofón lo puso la presidenta de la Asamblea, Gabriela Rivadeneira con un discurso en el que recordó el pasado colonial de Ecuador y el sufrimiento de una «patria mancillada», al tiempo que repasó la trayectoria histórica de la nación hasta llegar a los resultados del gobierno actual y los logros de la Revolución Ciudadana que lidera Rafael Correa.
En su opinión, la Revolución Ciudadana, como se conoce al proyecto político de Correa, que tiene al ser humano como centro del desarrollo, ha logrado dar nuevas esperanzas a los ciudadanos.
Los asistentes a la ceremonia en las barras altas aplaudieron y flamearon banderas de Ecuador cuando Rivadeneira dijo tajante que en el legislativo se aceptará debates pero no diálogos de sordos.
Los cientos de asistentes a la ceremonia ovacionaron de pie al saliente vicepresidente de Ecuador, Lenín Moreno, en silla de ruedas hace más de una década, cuando Rivadeneira le agradeció por su labor, en especial, por la realizada hacia las personas con discapacidad.
Antes de que Rivadeneira tome el juramento a Correa y le ciña la banda presidencial, un grupo de niños entonó la canción «Cómo será la patria».
Mientras sonaban las notas de esa canción, una niña con síndrome de down ingresaba a la parte principal de la Asamblea con la banda presidencial en sus manos para colocarse luego entre los titulares del Ejecutivo y el Legislativo. EFE