El vigente campeón de la Libertadores y del Mundial de Clubes de la FIFA, que perdió por 1-0 en su visita al Boca Juniors en La Bombonera en el partido de ida, necesita vencer esta noche por más de un gol de diferencia para avanzar a cuartos de final de la competición y mantener su sueño de retener los títulos que conquistó en 2012, los más importantes en toda su historia.
El club ‘xeneize’, por su parte, aspira a al menos un empate en el estadio Pacaembú, de la ciudad de Sao Paulo, para mantenerse con vida en la Libertadores y poder reconciliarse con sus hinchas, ya que vive actualmente su peor temporada en la liga argentina.
Además de la tradicional rivalidad entre argentinos y brasileños, el morbo del partido de hoy lo aumenta el hecho de que Corinthians fue precisamente el verdugo de Boca, el club suramericano con mayor número de títulos internacionales, en la final de la pasada edición de la Libertadores.
Boca Juniors llegó este martes a Sao Paulo con todas sus fichas apostadas en la Libertadores y con la intención de olvidar la serie de doce partidos consecutivos sin conocer la victoria en el Campeonato Argentino. EFE