Sao Paulo, que avanzó a octavos de la Libertadores tras haber vencido hace dos semanas por 2-0 al mismo Atlético Mineiro, espera que la pareja de atacantes integrada por Osvaldo y el joven Aloísio compense la ausencia del mundialista Luis Fabiano y vuelva a castigar al equipo de Ronaldinho.
El club tricolor contará con la ventaja de jugar en casa, el estadio Morumbí, con el apoyo de la gran mayoría de los 64.132 hinchas que agotaron los boletos.