«Hoy por hoy, Lionel Messi es el mejor futbolista del mundo y por lo tanto nos sentimos muy orgullosos de que quienes participaron en las votaciones le concedieran el premio de forma tan contundente», afirmó en una entrevista concedida a «fifa.com».
Blatter, no obstante, avanzó que como se invitó a la gala a los tres candidatos finales, «lo mejor sería entregar tres medallas, de manera que los otros dos no se vayan con las manos vacías». «Tendremos que pensar en ello para las siguientes ediciones», dijo.
El presidente de la FIFA destacó como uno de los momentos más importantes de 2012 la final olímpica de fútbol femenino, que congregó a 80.000 personas en Wembley, «el templo del fútbol masculino, para presenciar un partido entre mujeres», y expresó sus expectativas ante la Copa de las Confederaciones 2013, «una especie de ensayo general» para el Mundial del año próximo.
«No hay duda de que los estadios estarán a punto, pero queremos ver cómo se llena y se vacía un estadio, cómo se transporta a la gente y todos esos aspectos logísticos. Sin embargo, decir que la competición es un ensayo general no le hace justicia: en realidad es una reunión de campeones. Fíjese en los equipos clasificados; son extraordinarios», comentó.
Cuestionado por la fórmula para atajar problemas como los incidentes racistas o el amaño de partidos, Blatter afirmó que»el descenso es el mejor castigo para los racistas, porque no basta con poner multas», y señaló que «si la gente sabe que se puede amañar un partido, nunca más se creerá los resultados».
«Ahora nos toca a nosotros dar los pasos adecuados. No basta con poner multas. Una de las posibles sanciones sería jugar un partido a puerta cerrada, sin público, pero la mejor de todas consistiría en quitar puntos y relegar al equipo, porque en última instancia el club es el responsable de sus espectadores», aseguró Blatter.
El presidente de la FIFA definió los amaños como «uno de los demonios del fútbol»; recordó que desde su federación se colabora «con las autoridades políticas y también con la INTERPOL» y mencionó el reciente mensaje de Vicente Del Bosque al recoger el premio de mejor entrenador de 2012 sobre «ética y solidaridad en el fútbol».
«Si la gente sabe que se puede amañar un partido, nunca más se creerá los resultados. Lo que se necesita es solidaridad en el seno de la comunidad futbolística. Esto implica que los jugadores, entrenadores y árbitros, cuando esas personas se les acerquen, informen inmediatamente de ello, que denuncien estas prácticas. Sólo entonces podremos intervenir realmente», concluyó. EFE