El Ministerio de Defensa anunció el lunes que Enrique, de 28 años, ha emprendido el regreso al término de una misión de cinco meses en Afganistán, donde fue piloto de un helicóptero Apache en el Cuerpo Aéreo del Ejército ingles.
El ministerio se abstuvo de informar dónde se encontraba exactamente el príncipe, tercero en la línea de sucesión al trono británico.
En entrevistas para medios británicos que se le hicieron en Afganistán, Enrique se dijo aburrido y frustrado en ocasiones, así como satisfecho de su misión en la que disparó contra combatientes del Talibán en operaciones de apoyo a fuerzas terrestres. Cuando se le preguntó si había aniquilado enemigos desde la cabina del piloto respondió que “sí, igual que muchos”.