Espacios públicos y patrimoniales de Quito no podrán ser utilizados por las organizaciones políticas para la colocación de propaganda electoral. Y en caso de hacerlo, recibirán fuertes sanciones económicas.
La concejala de Quito, Elizabeth Cabezas, recordó a los partidos y movimientos políticos que participarán en las elecciones del próximo 17 de febrero, de la ordenanza de utilización de espacios públicos para la campaña electoral.
Entre las prohibiciones, la ordenanza 336 menciona las áreas públicas protegidas por completo. Por ejemplo, un perímetro restringido en su totalidad de proselitismo político es el Centro Histórico
No obstante, la utilización del espacio privado queda a disposición del propietario mediante un documento escrito. Pero si el inmueble es utilizado por determinado movimiento, queda prohibido para otro grupo político.
Asimismo, la publicidad en estos espacios deberá ser vallas desmontable, banderas o afiches adheridos a madera o cartón, o cualquier objeto de fácil colocación y desplazamiento.
En caso de que las disposiciones no sean cumplidas, El Municipio, a través de la Agencia de Control de Administraciones Zonales, quitará la publicidad y se deberá pagar 16 sueldos mínimos vitales.
Deberán dejar todo igual
Después de haber terminado el período de campaña electoral, el Municipio de Quito dispone que los responsables deben realizar el mantenimiento y reparaciones necesarias a los espacios usados. Estas acciones, en un plazo de 30 días.
Caso contrario, el Municipio ejercerá jurisdicción coactiva para el cobro de obligaciones.