Las luces que adornan el árbol de Navidad pueden ocasionar un incendio si no se toman las precauciones necesarias”, advierte Éber Arroyo, comandante del Cuerpo de Bomberos de Quito.
En el 2006 se produjeron cerca de 25 incendios y en los últimos dos años, el 2010 y 2011, se reportó un promedio 10 incendios eléctricos por año en la época navideña.
Frente a este peligro, Arroyo recordó que cuando instalan el árbol de Navidad, se debe verificar que se encuentren en buen estado los empates de los cables, constatar que tengan la protección aislante correspondiente. Luego de esta verificación, lo más importante es no colocar los juegos de luces conectando un enchufe, encima del otro.
Si existen artefactos eléctricos adicionales como televisores o radios, éstos deben estar conectados a otra regleta independiente.
Otra de las recomendaciones es que no se coloquen velas de los nacimientos ya que pueden convertirse en agentes combustibles que contaminen con fuego al musgo, cartones y árboles de plástico o naturales con que se confeccionan los arreglos navideños.
En posible caso de siniestro
Es fundamental que cuando se produzca un incendio eléctrico se desconecte de inmediato la fuente de suministro de energía (breakers) y, sobre todo, que no se intente apagarlo con agua.
Para ello es necesario utilizar un extintor de CO2 o de polvo químico de por lo menos 10 libras.
Finalmente, bajo ninguna circunstancia utilice fuegos pirotécnicos pues son una amenaza inminente.