Luego de un mes de gestiones, el cuerpo de Jesús Castillo Cedeño fue repatriado desde Venezuela. Los restos llegaron a Guayaquil, para luego ser llevados a Crucita, su ciudad natal.
Castillo tenía 15 años de edad y vivió solamente seis meses en tierras llaneras. Falleció el 21 de octubre en un confuso incidente, en el que él y tres primos terminaron asesinados y sepultados bajo tierra.
Su familia conformada por pescadores, aseguraron no tener la cantidad de dinero para repatriar el cuerpo, por lo que recibieron ayuda de la Secretaría del Migrante.