Son realmente alarmantes las cosas que vemos últimamente, los chicos cada vez están más cerca del consumo de drogas. En todo caso la solución no está solo en alarmarse, ni en la prohibición, sino en la educación integral de los jóvenes. La satanización de las sustancias estupefacientes causa el efecto contrario, ya que se vuelve un mito que se volverá más atractivo.
La educación y los valores desde el hogar se deberán complementar con las enseñanzas del colegio.
En todo caso los operativos son una herramienta que definitivamente ayudará a la disminución del tráfico y consumo de drogas, pero la verdadera solución está en la confianza que los chicos deben tener con sus padres, una buena comunicación es primordial para la prevención de este problema.