Vie. Nov 22nd, 2024

Las abejas podrían darles a los robots voladores una o dos lecciones en materia de navegación.

Es la premisa detrás un estudio que espera «reproducir» el cerebro de los pequeños pero complejos insectos para aplicarlos a la robótica, en uno de esos ejemplos en los que parece claro que la tecnología todavía tiene mucho que aprender de la naturaleza.

Los especialistas involucrados en el proyecto, de las universidades de Sheffield y Sussex en Reino Unido, están estudiando los sistemas sensoriales de las abejas, con la idea de crear modelos neurológicos que puedan ser incorporados a los robots que vuelan.

Los científicos creen que la sofisticada capacidad de las productoras de miel para procesar lo que ven y lo que huelen podría ser utilizada por los dispositivos para tomar decisiones que les permitan desplazarse con seguridad en el aire.

Los robots resultantes de esta investigación, en la que se está invirtiendo una suma cercana a US$1,5 millones, podrían ayudar en misiones de rescate o trabajar en granjas, polinizando mecánicamente los cultivos.

Inteligencia artificial

Uno de los coordinadores del proyecto, el doctor James Marshall, de la Universidad de Sheffield, le dijo a la BBC que simular un cerebro (de abeja, en este caso) es uno de los desafíos más grandes en el área de inteligencia artificial.

Hasta ahora, precisó, muchos de los intentos que se han efectuado para recrear cerebros biológicos en silicio se han concentrado en los sistemas cognitivos de los humanos, los monos y los ratones.

«Pero organismos más simples, como los insectos sociales, tienen habilidades cognitivas sorpresivamente avanzadas», afirmó.

Las abejas productoras de miel son bien conocidas por su capacidad infalible para encontrar el camino de regreso a la colonia o panal.

Se cree que utilizan la posición del sol como punto de referencia y que pueden «computar» el desplazamiento del astro en el horizonte al estimar la ruta que tienen que tomar para volver a casa.

«Debido a que el cerebro de la abeja es más pequeño y más accesible que el de ningún vertebrado, esperamos que eventualmente podamos producir un modelo exacto y completo que podamos probar en un robot volador», dijo Marshall.

Robots con cerebro de abeja

El plan es utilizar poderosas tarjetas gráficas para recrear los modelos de los sistemas sensoriales, tal que puedan manejar los cálculos necesarios para simular el cerebro de las abejas.

Muchos científicos han comenzado a usar tarjetas gráficas como «máquinas de calcular», debido a que son menos costosas y más fáciles de usar que las supercomputadoras tradicionales.

El equipo de investigadores espera que un robot con «cerebro de abeja» pueda tomar decisiones sobre la base de lo que perciben sus «sentidos», más que como resultado de tareas pre-programadas.