Charly, 52 años. Mi esposa ya no quiere hacer el amor conmigo. Siempre vive resentida y me culpa de todos sus males. Es verdad que no he sido un hombre santo y que he fallado un par de veces, pero tampoco soy un canalla. Comprendo que a veces ella está muy cansada y no tiene ánimos de complacerme, pero normalmente no hace nada en todo el día, porque le puse empleada. Me siento mal, a ningún hombre le gusta que lo rechacen. Las mujeres no entienden que eso nos hace daño. Mi señora no comprende que necesito acercarme a ella. No se trata solo de hambre de sexo, pues tengo quien me satisfaga. Quiero recobrar el romance con mi esposa.
Mi querido Charly:
Demuéstrale a tu esposa que la quieres y que has cambiado. Para algunas mujeres es difícil tener relaciones cuando su corazón está herido. Trata de enamorarla nuevamente.
Tu amiga Conchita