Más leña al fuego de la ira musulmana, tras la publicación que ridiculiza a Mahoma.
Resulta arrogante y sin sentido enfrentar a dos regiones por sus creencias. Cada quien está en el derecho de creer lo que quiera y en quien quiera. Es más, eso está estipulado en los Derechos Humanos en los que tanto nos hemos escudado. Intolerancia humana, uno de los peores males, ha ocasionado guerras y catástrofes que bien se pudieron evitar.
¿Cual es el problema en que tengamos creencias y modos de vida diferentes?
¿Acaso no podemos llegar a consensos sin que tengamos que enfrentarnos? Y no nos referimos solo a la intención occidental de controlar el mundo, sino también del radicalismo musulmán, que se ha tomado demasiadas atribuciones con el mundo. Hay cosas más importantes.
