La energía eólica en el planeta podría satisfacer de 20 a 100 veces las necesidades de electricidad a nivel mundial, al existir un potencial de hasta mil 800 Terawatts (TW) a través de la atmósfera.
Así lo revela el estudio más reciente hecho sobre la materia por el Instituto Carnegie y el Lawrence Livermore National Laboratory, el cual demuestra que todas las necesidades de energía del mundo podrían ser cubiertas por completo con la energía eólica.
La investigación dirigida por la investigadora del Livemore National Laboratory, Kate Marvel, refiere que la civilización actual solo necesita alrededor de 18 TW de energía para atender todas sus necesidades.
Bajo esa perspectiva y al considerar la capacidad tecnológica de las actuales turbinas eólica, el equipo investigador detalló que se podrían extraer hasta 400 TW de energía de los vientos superficiales del planeta.
El potencial se incrementa hasta más de mil 800 TW si se considera la totalidad de los vientos generados en la atmósfera entre los que se encuentran los marinos y los de gran altitud y que fluyen en estratos superiores.
De acuerdo con el estudio publicado en la revista Nature Climate Change, los vientos de superficie podrían ser explotados por torres en tierra o en mar (con la tecnología on-shore y off-shore).
Mientras tanto, los vientos de gran altitud solo podrían ser accesibles mediante el uso de tecnología que combina turbinas y cometas, por lo que los únicos factores que de momento limitan su estudio a fondo y su explotación son los geofísicos y la falta de recursos.
En un comunicado publicado por el Instituto Carnegie en su portal, detalló que para el estudio se consideró también el potencial de extracción de estos vientos y la posible afectación al medio ambiente.
En ese sentido, los investigadores encontraron que «los niveles máximos de extracción de energía no provocarían efectos sustanciales en el clima».
De hecho descubrieron que dado el potencial eólico de la atmósfera, en realidad el nivel de demanda mundial actual sería muy pequeño, siempre y cuando las turbinas se extendieran y no se agruparan en unas pocas regiones.
Si toda la energía del mundo fuera proporcionada por la energía eólica, las turbinas de viento cambiarían la temperatura del planeta en apenas 0.1 grados Celsius y alterarían los niveles de precipitación en torno al 1.0 por ciento.
Por lo anterior, estos no serían cambios que generen impactos ambientales importantes, como los que actualmente provocan los combustibles fósiles que emiten CO2 a la atmósfera.
En todo caso, estima, es más probable que los factores económicos, tecnológicos y políticos sean los que determinen el crecimiento de la energía eólica en todo el mundo, más que las limitaciones geofísicas del planeta.
FUENTE:EL UNIVERSAL.CIENCIA