6 sep (EFE).- La ciudad brasileña de Río de Janeiro será transformada a partir de mañana en un gigantesco museo al aire libre con la instalación en diferentes locales públicos de cuatro enormes esculturas o intervenciones de reconocidos artistas internacionales, y la proyección de dos espectáculos audiovisuales.
Las obras serán presentadas oficialmente el viernes, cuando los brasileños conmemoran el festivo del Día de la Independencia, pero algunas, como la cabeza gigante creada por el español Jaume Plensa y que «flota» en la Bahía de Guanabara, llaman la atención desde hace algunos días.
Las creaciones pueden ser vistas gratuitamente en espacios públicos de alto tránsito como la plaza de la Cinelandia, el parque de Madureira, las playas de Botafogo y Arpoador, y los Arcos de Lapa.
La inédita y pública muestra internacional de arte con obras de artistas consagrados internacionalmente es resultado del proyecto OiR (Otras ideas para Río), una sigla que, leída al revés, se refiere también al nombre de la ciudad.
La intención es precisamente pasar la idea de que la ciudad puede ser pensada de una forma diferente, dijeron a Efe los organizadores de la muestra, entre los cuales la organización Globo Río, vinculada al conglomerado de medios de comunicación Globo.
El objetivo de los organizadores es montar una exposición semejante en espacios públicos a cada dos años hasta los Juegos Olímpicos que Río de Janeiro organizará en 2016.
Las obras de la primera exposición fueron creadas especialmente por el artista inglés Andy Goldsworthy, el productor musical inglés Brian Eno, el escultor español Jaume Plensa, el escultor estadounidense Robert Morris, el proyectista japonés Ryoji Ikeda y el escultor brasileño Henrique Oliveira.
Las esculturas e intervenciones podrán ser apreciadas por los cariocas y los turistas hasta el 3 de noviembre, mientras que el espectáculo audiovisual de Ikeda sólo será proyectado por tres días hasta el domingo y la proyección digital de Eno exhibida entre el 19 y el 21 de octubre.
La exposición al aire libre comenzó a despertar curiosidad el lunes, cuando una grúa colocó sobre una base especial y en medio de la Bahía de Guanabara la cabeza humana en fibra de vidrio creada por el catalán Plensa.
Se trata de «Awilda», una escultura de doce metros de altura que representa el rostro de una niña tahitiana y que parece flotar en las aguas frente a la playa de Botafogo.
La curiosidad aumentó este viernes cuando Morris concluyó el gigantesco laberinto triangular de vidrio que montó en la Cinelandia, una de las principales plazas públicas de Río de Janeiro y ubicada frente a la sede del Concejo municipal.
Hoy también era posible ver desde afuera la gigantesca cúpula en arcilla montada por Goldsworthy en la sede de la Acción de la Ciudadanía, un centro cultural próximo al puerto de Río de Janeiro.
El interior de la escultura en forma de iglú podrá ser visitado por el público a partir de mañana.
El brasileño Oliveira, por su parte, optó por una gigantesca escultura de madera que fue instalada en el Parque de Madureira. La obra tiene la forma de una vía con un nudo en el medio para permitir el paso del público.
En las noches del 7, el 8 y el 9 de septiembre será posible ver el espectáculo audiovisual montado por Ikeda y que será proyectado sobre las arenas de la playa del Arpoador. El proyector para esta instalación fue instalado en una torro de 15 metros de altura.
Los cariocas tendrán que esperar hasta el 19 de octubre para ver las miles de imágenes digitales que Eno proyectará sobre las columnas blancas de los Arcos de Lapa, el antiguo acueducto de estilo romano de Río de Janeiro y que hoy es un importante local turístico. EFE