Kim Kardashian alberga la esperanza de contraer matrimonio y formar una familia con su novio rapero, aunque el proceso de divorcio que mantiene está retrasando los planes de la pareja.
“Kim y Kanye quieren casarse tan pronto como puedan, pero si Kris alarga el divorcio, ella sacrificará momentáneamente los planes de boda y dará prioridad a formar una familia”, publicó Heat.
Pero ante todo, la diva quiere dejar claro que, aunque los proyectos no se den pronto, le gustaría pasar con West el resto de su vida.