23 ago (EFE).- Un nuevo duelo entre los que probablemente son los dos mejores jugadores del mundo, aspirantes al Balón de Oro, con inagotables recursos y letales ante la portería, terminó con una victoria a los puntos para Leo Messi, que sumó más en la victoria de su equipo (3-2) ante un Cristiano que también ‘mojó’.
El duelo de titanes se saldó con un tanto para cada jugador, pero con un Messi mucho más activo que el portugués, y que cercenó su mala racha ante los blancos con un gol de penalti.
Lionel Messi mostró las ganas de sacarse la espina de los últimos clásicos, ya que en los cuatro partidos anteriores contra los madridistas no había visto puerta.
Muy activo y en su posición de falso nueve, Messi se alió con los de siempre, Xavi, Iniesta, Pedro o Alves, para fabricar sus ocasiones.
Fue el primero en disparar con peligro, en el minuto 19, tras recibir una asistencia del brasileño Alves desde la línea de fondo. Con muchas piernas delante, buscó desde dentro del área la escuadra de Casillas, pero su balón no encontró portería cuando el Camp Nou ya cantaba el primer gol.
Por su parte, Cristiano, partiendo muy retrasado en la banda izquierda -algunas veces incluso parecía lateral- no encontraba la manera de desplegar todo su juego de potencia, velocidad, regate y disparo.
En los primeros 45 minutos no llegó ni a chutar a puerta, y eso que el portugués no es de esos jugadores que se lo piensa a la hora de armar la pierna.
Tan solo fue destacable una jugada por banda derecha en la que, con un regate de malabarista, se fue de Piqué para sacar un centro que no encontró rematador.
Messi sí estuvo a punto de marcar de nuevo con otra jugada marca de la casa del argentino (m.29). Asociación con Xavi, y disparo cruzado con su pierna izquierda, pero la pelota volvió a perderse por la línea de fondo.
Ambas estrellas querían brillar, y el primero en pegar fue el madridista, que cada vez se muestra más en las grandes citas contra el Barça.
El de Madeira vio de nuevo puerta en la misma portería que el año pasado en liga, cuando sentenció el título para el Madrid en el Camp Nou.
En esta ocasión, explotó una de sus mejores características en la que es infinitamente superior a Messi, el juego aéreo. El córner servido por Özil lo remató al fondo de la portería de Valdés con un gran testarazo (m.54) en la primera ocasión del Madrid en todo el partido.
La respuesta de Messi no tardó en llegar, y tras el rapidísimo empate de Pedro, el argentino se echó el equipo a la espalda junto al gran Andrés Iniesta, que provocó el penalti.
Messi se olvidó de su error contra el Chelsea la pasada temporada -que a la postre significó la eliminación del Barça en Liga de Campeones- y batió a Casillas.
El vibrante duelo podría haber sido más azulgrana si el argentino hubiera superado a Iker en una clarísima acción que no acostumbra a fallar, pero el meta de la selección española salvó a su equipo, y al momento, el Madrid vio la luz tras un error de Valdés para poner el 3-2.
Esto no ha hecho nada más que empezar y el duelo entre estos dos titanes está servido para lo que resta de año, con la vuelta de la Supercopa del próximo miércoles como segundo asalto. EFE