Estudiantes de la Universidad Católica de Cuenca denunciaron un aumento de hasta el 140% en el cobro de matrículas.
Según los afectados, antes tenían que pagar 75 dólares, pero ahora deberán cancelar 180 para poder continuar sus estudios. Cerca 300 estudiantes de las distintas carreras del centro de estudios protestaron esta semana, para luego reunirse con el gobernador de la provincia.
Los alumnos pidieron a las autoridades la suspensión de las matrículas. Por su parte, el departamento de conflictos sociales de la Gobernación, dijo que desde esta entidad no pueden pedir que se suspendan, pero respaldan la posición de los estudiantes y pidió que se conforme una comisión para que represente al grupo.
Mientras tanto, Enrique Pozo, vicerrector del plantel, dijo que el ajuste se debe a una exigencia del CEAACES, y del SENESCYT.