16 ago (EFE).- Neymar, el más destacado de los jugadores de la selección brasileña que disputó los Juegos Olímpicos de Londres y el amistoso en que Brasil se impuso por 3-0 a Suecia, regresó hoy al país en una lujosa avioneta que él mismo fletó para poder disputar esta noche un partido del club Santos por la Liga.
El atacante, que el sábado se colgó la medalla de plata en Londres 2012 con la selección brasileña, abordó la aeronave en la noche del miércoles, inmediatamente después del partido en Estocolmo que sirvió para despedir al Rasunda, el estadio en que Brasil conquistó su primer título mundial (1958) y que será demolido.
El delantero, una de las mayores revelaciones del fútbol brasileño en los últimos años, aterrizó en la mañana de este jueves en la ciudad de Florianópolis, en donde el Santos se medirá al Figueirense por el Campeonato Brasileño, y alcanzó a descansar en un hotel diez horas antes de dirigirse al estadio.
El propio jugador publicó una fotografía en su página en Twitter en la que mostró los lujos de la aeronave, un avión ejecutivo con una cómoda cama que le permitió dormir durante las catorce horas del viaje.
El delantero asumió la responsabilidad de jugar en Brasil con el Santos un día después de haberlo hecho en Suecia con la selección brasileña.
El Santos no declinó la ayuda debido a que está en los últimos lugares de la clasificación del Campeonato Brasileño y confía en su estrella para comenzar un proceso de recuperación. EFE