Katy Perry mostró una parte de ella misma en una mojada visita al Raging Waters en la ciudad de San Dimas, California. El lugar es un parque de atracciones con juegos de agua que pueden transformarse en los peores enemigos de un bikini. Por suerte, Katy Perry tiene un gran sentido del humor y se rió de ella misma luego de acomodarse la prenda inferior que se había salido completamente de su lugar… Una ola la dejó al descubierto.