El mundo ha lamentado las víctimas del último ataque en un cine de Estados Unidos, el fin de semana, desde ahí se han cuestionado desde el cine y la televisión hasta la música. En este sentido podremos aseverar que lo que vemos en las pantallas no es sino un reflejo de las sociedades en las que vivimos. No negaremos tampoco que la violencia está a la orden del día en el medio. Pero para que un joven tenga este tipo de acciones es necesario tener en cuenta la educación y la formación que ha recibido en el hogar. La violencia está allí pero es obligación de los padres el enseñar a sus hijos a dilucidar que es lo que toman de lo que ven; cómo lo perciben y como lo interiorizan. No podremos encerrarnos para que estas cosas no nos alcancen, más bien tendremos que aprender a afrontarlas.