15 jul (EFE).- El creativo argentino Omar Pérez recibió hoy el doctorado de ‘experto en finales’ al resolver a favor del Independiente Santa Fe con un lanzamiento a distancia suyo a la cabeza de Jonathan Copete la final de la Liga colombiana.
Pérez, el jugador al que Carlos Bianchi hizo debutar en Boca Juniors, es a los 31 años la figura en el fútbol colombiano y con sus pases milimétricos, como el de hoy, el artífice del séptimo título en la historia del Independiente Santa Fe, un logro que tardó 37 años en repetirse.
El talentoso jugador nacido el 29 de marzo de 1981 en Santiago del Estero, es el símbolo de la nueva generación vencedora del Independiente Santa Fe, equipo colombiano que alcanzó a rebañar dos generaciones de hinchas sin conocer un título.
El capitán del equipo albirrojo, que tiene a Bianchi como el entrenador que lo marcó futbolísticamente en los cinco años que trabajaron juntos desde cuanto tenía 16, es el destinatario de toda la pasión de su hinchada.
Incluso a través de canciones, como la compuesta por militantes de las barras organizadas ‘Pasión Cardenal’ y Sangre Cardenal’: «Aprendimos a quererte, te robaste el corazón de esta hinchada, no hay palabras para agradecerlo…».
En Colombia, además de Santa Fe, Pérez ha jugado en el Atlético Junior, donde comenzó su periplo, Real Cartagena e Independiente Medellín.
El título de hoy lo ha consagrado como un experto en finales.
La primera la disputó con el Atlético Junior, con el que conquistó el Torneo Finalización de 2004.
No corrió la misma suerte con el Independiente Medellín, que perdió el Torneo Finalización del 2008 ante el América de Cali.
La tercera final la ganó con el Independiente Santa Fe por la Copa Colombia en el 2009, precisamente frente al Deportivo Pasto.
Con la victoria de hoy por 1-0 sobre el Deportivo Pasto en Bogotá tras un 1-1 en la capital de Nariño, llegó su nueva consagración.
Pero su experiencia en finales no pasa solo por el fútbol colombiano, pues fue campeón con el Boca Juniors en la Copa Libertadores del 2001.
Además del club xeneize, Pérez militó en el Banfield de su país, y el Jaguares de Chiapas mexicano.
Aunque su desempeño es de envidiar por muchos volantes creativos que quisieran como él marcar el desequilibrio de sus equipos, manejar el balón a su antojo y cuidar cada jugada, Pérez asegura que la figura no es él, sino todo el equipo.
«Aquí la figura no soy yo, es todo el equipo», ha señalado cuando los medios de prensa lo reseñan como el guía referente del once santafereño, en el que no solo es uno de sus goleadores, sino uno de sus mejores pasadores.
«Yo tuve un sueño hace tres semanas, un sueño en el que había una tarima en el estadio y éramos campeones. Tuve un sueño… Vi a mi papá, que fue futbolista; a mis hijos, que gozaban; a mi esposa, que nos acompañaba. Tuve un sueño en el que vi a tres generaciones en el estadio llorando, abrazándose…», declaró Pérez en una entrevista que publicó hoy el diario El Tiempo. EFE