EMASEO se lanzó a la eficiencia. Gerente asegura que la empresa, en los últimos tres años, ha recuperado su credibilidad.
Hace tres años, no merecía el título de empresa porque carecía de sistemas informáticos, de control de su flota y de monitoreo de gastos en llantas, combustible o lubricantes, afirma Carlos Sagasti, gerente de EMASEO.
“EMASEO tenía el nombre desgastado, se asociaba a una empresa ineficiente. Esa imagen se va creando cuando las empresas no se fortalecen. El primer impulso que se dio es lavarnos la cara: somos una empresa de limpieza, de aseo y eso se debía hacer puertas adentro empezando por cambiar el uniforme, pintar nuestras instalaciones, y tener unos muebles y adecuaciones acorde al año en que vivimos”, señala el gerente Carlos Sagasti.
Fue entonces que EMASEO comenzó a recuperar el prestigio de su nombre, pero los esfuerzos desplegados en estos años de gestión también se han enfocado en el mejoramiento de la calidad de vida del trabajador operativo y administrativo, explica Sagasti.
Para el gerente de EMASEO, una empresa -por pública que sea- jamás debe perder de vista su rentabilidad, costos e indicadores, y revela que el trabajo al interior de la entidad está marcado por un factor constante: que la ciudad posea una empresa de aseo sustentada en una sólida infraestructura empresarial que pueda, no solo ahora sino en el futuro, seguir creciendo y ampliar y mejorar su servicio a la ciudadanía.
En conclusión, Sagasti asevera que el sector público no puede jamás ser sinónimo de ineficiencia y está conciente este sector juega un papel primordial en la consolidación institucional y gubernamental de cualquier país.
Indicadores de desempeño
EMASEO atiende a una población de 2’239.191 personas que habitan en Quito. La cobertura del servicio de recolección alcanza al 96,5%, en un trabajo ininterrumpido que se realiza los 365 días del año. Dispone de 1.212 empleados que cada día recolectan 1.600 toneladas de basura.