Ayer, un sismo de 5,8 grados en la escala de Richter afectó el norte de Italia. Según presidente Monti, todo está bajo control.
Al menos quince personas han muerto y hay varios desaparecidos por el terremoto de magnitud 5,8 grados en la escala Richter que sacudió ayer la región de Emilia Romagna (norte de Italia), tras el derrumbe de varios edificios y naves industriales.
El director de Protección Civil en la región, Demetrio Egidi, explicó al canal “Skytg24” que por el momento se cuentan quince muertos y cientos de heridos, y que se han recibido unas 6.000 peticiones de evacuación.
El temblor tuvo su epicentro en la provincia de Módena, en la región de Emilia Romagna, en la misma zona en la que ya se produjo el terremoto del pasado 20 de mayo, que causó siete muertos y 5.000 evacuados, a los que se sumarían los de este sismo.
Al temblor de 5,8 grados de las 09h00 hora local (07h00 GMT) le siguieron hasta 40 réplicas de menor intensidad, hasta las 13h00 hora local (11.00 GMT), cuando se produjeron dos nuevos terremotos de 5,3 y 5,1 grados en la escala Richter. Estos terremotos empeoraron la ya grave situación en la región causando nuevos derrumbes en los edificios e iglesias de las zonas ya afectadas, aunque esta vez sin víctimas. EFE
Monti tiene todo bajo control
El presidente del Gobierno italiano, el tecnócrata Mario Monti, compareció ante los periodistas tras el sismo para garantizar que “se hará todo lo posible y lo antes posible” para llevar ayuda a los ciudadanos, y aseguró que Italia “superará este momento”.
Estos temblores se sintieron en todo el norte y centro del país, en las regiones -además de Emilia Romagna- de Génova, Lombardía, Piamonte, Veneto y Toscana, y fueron desalojados numerosos edificios públicos en varias ciudades, como Milán, Bolonia y Florencia.