Vie. Nov 22nd, 2024

En el día de trabajo y en un año marcado por la crisis es fácil empatizar con el ‘cine obrero’ que profundiza esta preocupación social.

Los hermanos Lumiére ya filmaron a unos obreros saliendo de una fábrica, pero desde entonces hasta ahora, el abuso capitalista, las huelgas o el paro han inspirado películas tan conocidas como “The Grapes of Wrarth”, “Metropolis”, “Ressources Humaines”, “My Name is Joe” o “Los lunes al sol”.
Fue la Rusia postrevolucionaria la responsable de crear las primeras obras del cine que miraba al trabajador. Basta la filmografía de Sergei Eisenstein para encontrar la reinvindicación del proletariado.
En Alemania, Fritz Lang coronaba su época expresionista con “Metropolis”, filme en el que el realizador vaticinaba, sin andar del todo desencaminado, una sociedad mecanizada y privada de libertades, en pos de una oligarquía derrochadora.
Y en Hollywood, sin palabras pero cuando ya existía el sonido, Charles Chaplin se rebelaba contra el progreso y denunciaba la alienación del trabajador con “Modern Times”.
La Gran Depresión se tradujo en filmes como la comedia esperanzadora “Sullivan’s Travels” o “The Grapes of Wrarth”, dirigida por John Ford y basada en el libro de John Steinbeck, análisis de cómo pagan los desmanes de una sociedad derrochadora los que nunca disfrutaron la opulencia.
En Francia, Jean-Luc Godard, tras fundar la “nouvelle vague” se hace más radical políticamente y rodó en 1972 “Tout va bien”, la historia de un matrimonio en crisis que se ve envuelto en una huelga de trabajadores, dilucidando así si la revolución y el amor son compatibles.
Ya en el siglo XXI, con el auge capitalista y la globalización, Laurent Cantet realizó “Ressources Humaines”, sobre los expedientes de regulación de empleo, y “L’emploi du temps”, basada en el caso de un hombre que se suicidó tras ocultar a su familia que había sido despedido.
Y finalmente, en España, Fernando León culmina su carrera con “Los lunes al sol”, retrato desgarrador de supervivencia y dignidad de un grupo de desempleados tras el cierre de unos astilleros en Vigo, aunque las dificultades de un país a mediados del siglo XX se rodó con humor en “El verdugo”.EFE

“The Grapes of Wrarth”

ste film, inspirado en un libro de John Steinbeck, fue realizado en los años 1940, donde el cine estadounidense no realizaba apenas películas de realismo social para olvidar a la sociedad el problema en el que se encontraban. La historia se trata de una familia de granjeros que tiene sus tierras en Oklahoma y que tras el crack del 29 son expulsados de su propiedad y tienen que emigrar a California donde pasarán muchas marginaciones.