Después de Britney Spears sufriera un colapso nervioso en 2008, un juez otorgó su custodia, que incluye el manejo de sus finanzas, a su padre, Jaime Spears. Ante la próxima boda de la intérprete, este ha decidido compartir esta obligación con su futuro yerno, Jason Trawick.
El novio de Britney, sería su cotutor legal, quien estará a cargo de su bienestar, pero no tendrá acceso a sus finanzas. Trawick podrá tomar decisiones sobre su alimentión, ropa y medicina.