Las FARC liberó a los últimos diez policías y militares que estaban secuestrados, en una jornada de 12 horas.
Tras meses de preparativos, bajo la coordinación del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) y la mediación del colectivo Colombianas y Colombianos por la Paz (CCP), liderado por la exsenadora Piedad Córdoba, una misión humanitaria recogió en un lugar de la selva, entre los departamentos sureños del Meta y Guaviare, a los diez uniformados.
Una misión exitosa y con sorpresas, ya que estaba previsto que las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) entregaran sólo a un grupo de secuestrados y hoy al resto.
Los cambios se dieron sobre la marcha durante una jornada que amaneció lluviosa en Villavicencio, en el aeropuerto base desde donde partió la misión con dos horas de retraso a causa del mal tiempo.
Sólo 50 minutos después llegaban al aeropuerto de Villavicencio, donde la portavoz del CICR, María Cristina Rivero, manifestó, su alegría “por el éxito de esta operación que permitió en un solo día la reunión de 10 familias que estuvieron esperando por tantos años”. Allí descendieron del aparato los diez policías y militares, con ropas limpias, afeitados y con aparente buen estado de salud, emocionados por la vuelta.
Piden cumplir con acuerdos. La exsenadora Piedad Córdoba celebró con euforia el éxito de la misión humanitaria y el proceso de liberaciones que se inició en 2009 por iniciativa unilateral de las FARC a raíz de un intercambio epistolar con el CCP.
Además, pidió al Gobierno que permita visitar a los guerrilleros presos en las cárceles, algo que el Gobierno se denegó hace algunas semanas. “Tengo que insistir en los compromisos que tenemos para que el Gobierno nacional autorice la entrada nuestra en las cárceles para que se aplique el derecho humanitario”, dijo Córdoba.