Vie. Nov 22nd, 2024

3 abr (EFE).- El presidente francés, Nicolas Sarkozy, negó hoy que recibiera dinero ilegalmente para la campaña para su elección en 2007 de la familia Bettencourt, principales accionistas de L’Oréal, y subrayó que sus cuentas han superado todos los controles.

Sarkozy dijo, en una entrevista a la cadena de televisión Canal Plus, que las cuentas de su candidatura hace cinco años «no las ha contestado nadie» y han pasado el control del Tribunal de Cuentas y el Consejo Constitucional, ante los que se ha justificado «hasta el último céntimo».

Consideró que las informaciones sobre la supuesta entrega de dinero a comienzos de 2007 por los multimillonarios André Bettencourt y su mujer Liliane son una maniobra para desprestigiarlo de cara a los comicios presidenciales del 22 de abril y del 6 mayo en los que opta a la reelección.

«Como siempre antes de las presidenciales, hay bolas hediondas», señaló cuando se le comentaron las revelaciones en algunos periódicos, en especial «Le Monde», que afirma que diversos elementos prueban que Sarkozy estuvo en casa de los Bettencourt el 24 de febrero de 2007, en unas fechas en que habían repatriado grandes cantidades de dinero en efectivo de cuentas no declaradas en Suiza.

El jefe del Estado dijo que «claro que sí» pudo estar en casa de los multimillonarios, que eran de su mismo partido y tienen su mansión en Neuilly, la rica ciudad limítrofe con París de la que él mismo fue alcalde.

Por otro lado, Sarkozy avanzó que el próximo jueves presentará «un plan global y coherente» a los electores y justificó no haberlo hecho hasta ahora porque si hubiera actuado así la mecánica de los medios de comunicación la hubiera «quemado» y él prefiere ir desgranando sus propuestas.

Se mostró satisfecho con su acción de gobierno, gracias a la cual pese a que «Francia ha pasado tres años de una crisis inaudita (…) es el único país europeo donde el poder adquisitivo ha progresado cada año» y «el único país occidental» donde el Producto Interior Bruto (PIB) no ha bajado ningún trimestre desde comienzos de 2011.

«¿Queremos en Francia la situación de Grecia o de España?», se preguntó Sarkozy, antes de asegurar que si hubieran sido los socialistas los que hubieran estado en el poder durante la crisis las cosas hubieran ido peor para el país. EFE