1 abr (EFE).- La Policía belga detuvo hoy a un total de 483 activistas que formaban parte de un grupo de unos 500 pacifistas internacionales, según los organizadores, que intentaron entrar en la sede de la OTAN para protestar por sus operaciones en el exterior y el mantenimiento de armas nucleares tácticas en Europa.
Según informaciones de los organizadores, encabezados por «Acción por la paz» y «Vredes Actie», al menos quince activistas habrían logrado entrar en el recinto fuertemente custodiado y protegido por vallas de la OTAN, aunque fueron inmediatamente detenidos junto a otros cientos de simpatizantes.
Según la Agencia Belga, que cita fuentes de la policía, los detenidos, que suman 483 personas, fueron llevados a la comisaría de Etterbeek, pero serán puestos en libertad en unas horas.
Los activistas, que se repartieron en un equipo de intervención y de apoyo, viajaron a Evere (Bruselas) desde Alemania, Holanda, Francia, Reino Unido, Finlandia, Suecia, Turquía, Italia, Portugal y España, además del interior Bélgica.
Las fuerzas de Seguridad les impidieron acercarse a la sede de la OTAN y los activistas tuvieron que conformarse con una zona verde acordonada con vallas y vigilada por la policía, llamada «plaza de libre expresión» y «área de apoyo» por el grupo y que estaba situada en frente de la Alianza Atlántica.
Helicópteros sobrevolaron la sede de la OTAN y el personal de seguridad de la Alianza también estaba en máxima alerta, apoyando el fuerte dispositivo de la Policía belga.
Los activistas, que comentaron la protesta en directo a través de la red social «Twitter» y la grabaron con móviles y cámaras de vídeo para transmitirla a través de Internet, fracasaron en su primer intento de entrar en la OTAN.
Al intentar rodear el terreno en el que se encuentra la sede para tratar de saltar las vallas y forzar el cierre del recinto, fueron inmediatamente interceptados por policías a caballo, relataron los activistas, que tampoco lograron llegar a la sede de la Alianza por calles más pequeñas y por atajos, relataron sus portavoces.
Con pancartas en las que se podía leer «fuera de Afganistán, no más asesinatos» y «si queréis otro mundo, desarmad el sistema», los activistas querían enviar el mensaje a los jefes de Estado y de Gobierno de cara a la cumbre de la OTAN que se celebrará los día 20 y 21 de mayo en Chicago (EEUU).
El mensaje de que la organización «es un peligro para la paz mundial» y «crea más problemas de las que resuelve», según dijeron.
«No queremos un escudo antimisil. No queremos tropas de la OTAN en Libia o Afganistán. No queremos peligrosas, inútiles e ilegales armas nucleares», señaló la organización «Acción por la Paz» en un comunicado.
Este grupo ya protagonizó acciones similares en 2008 y 2009 en la sede de la OTAN, que concluyeron con la detención de cientos de personas, en la base militar de Kleine Brogel (noreste de Bélgica), donde se cree que hay almacenadas armas nucleares tácticas, o en la sede del Cuartel General de la OTAN para Europa en Mons (sur del país). EFE