29 mar (EFE).- El presidente de EE.UU., Barack Obama, urgió hoy al Congreso a aprobar un proyecto de ley para eliminar los beneficios fiscales por 24.000 millones de dólares que reciben las compañías petroleras, las cuales -dijo- «pueden mantenerse por sí mismas».
Además de tener «beneficios récord», esas compañías perciben «miles de millones al año en subsidios de los contribuyentes, una subvención que han disfrutado año tras año en el último siglo», subrayó Obama en un discurso en la rosaleda de la Casa Blanca.
«Piensen en eso. Es como golpear dos veces al pueblo estadounidense», dijo Obama en referencia al encarecimiento de la gasolina en el país.
El Senado tiene previsto realizar hoy una votación de procedimiento sobre un proyecto de ley que busca eliminar esos subsidios fiscales que benefician a las compañías petroleras. Los republicanos, que son minoría en el Senado, se oponen a la terminación de los subsidios.
El presidente enfatizó que el año pasado las tres mayores empresas petroleras del país se llevaron más de 80.000 millones de dólares en ganancias y que cada vez que la gasolina sube un centavo esas compañías se embolsan 200 millones de dólares en sus beneficios trimestrales.
Actualmente el precio medio del galón (3,78 litros) de gasolina en EE.UU. ronda los cuatro dólares.
Ese encarecimiento de la gasolina afecta sobre todo a la clase media y, en plena campaña para las elecciones presidenciales del 6 de noviembre, los republicanos le reprochan a Obama que no consiga frenarlo.
Por ello, el presidente se ha enfocado en las últimas semanas en defender en actos de campaña y en varias giras por el país su política energética, centrada en el desarrollo de las energías limpias y el aumento de la producción nacional de petróleo para reducir la dependencia del exterior.
«Con récord de beneficios y aumento en la producción, no estoy preocupado por las grandes compañías petroleras. Con los altos precios del petróleo tienen incentivos más que suficientes para producir más», insistió Obama.
En lugar de seguir dando «regalos» a una industria «que nunca ha sido más rentable», hay que invertir en energías limpias, «que nunca han sido tan prometedoras», destacó.
«No quiero que los estadounidenses paguen más en el surtidor (de gasolina) cada vez que hay disturbios en Oriente Medio. No quiero que nuestros niños sean rehenes de los acontecimientos en el otro lado del mundo», afirmó el mandatario.
Según Obama el Congreso debe optar «para gastar miles de millones de dólares en subsidios petroleros que nos mantienen atrapados en el pasado» o ponerles fin e «invertir en el futuro».
El proyecto de ley que se someterá hoy a una votación de procedimiento en el Senado, promovido por el demócrata Robert Menéndez, propone eliminar 24.000 millones de dólares en deducciones fiscales a las petroleras. EFE