25 mar (EFE).- La presidenta brasileña, Dilma Rousseff, viaja hoy a Nueva Delhi, donde asistirá a la IV Cumbre del foro BRICS -formado por Brasil, Rusia, India, China y Suráfrica-, que este año se centrará en el análisis de la crisis global y su impacto en el comercio.
La cumbre, que reúne los mandatarios de cinco de las principales economías emergentes del mundo, se celebrará los próximos miércoles y jueves en Nueva Delhi y, tras la clausura, la presidenta brasileña realizará el viernes la que será su primera visita de Estado a la India.
La mandataria partirá esta noche y llegará a la capital india el martes, pero no tendrá ninguna actividad oficial hasta la noche del miércoles, cuando asistirá a una cena ofrecida por el primer ministro indio, Manmohan Singh, a los líderes del BRICS.
Según adelantaron fuentes oficiales brasileñas, entre los asuntos que serán debatidos en el foro BRICS figura la posible creación de un banco de fomento, constituido con capital de los cinco países y que estaría volcado a la financiación de proyectos de desarrollo en los propios miembros del grupo y en naciones en desarrollo.
El ministro de Desarrollo, Industria y Comercio Exterior de Brasil, Fernando Pimentel, quien integra la delegación que acompaña a Rousseff, dijo este viernes a corresponsales extranjeros que esa iniciativa está en una fase «inicial», pero aseguró que el proyecto despierta el «mayor interés» en el Gobierno brasileño.
El ministro explicó que la institución que podría nacer dentro del BRICS «no significaría abandonar los organismos multilaterales», a los que las economías emergentes les reclaman poder tener una mayor presencia y poder de voto en las grandes decisiones.
«Son cosas distintas», indicó Pimentel, quien explicó que organismos como el Fondo Monetario Internacional (FMI) o el Banco Mundial (BM) tienen ciertas limitaciones, entre las que citó la imposibilidad de financiar directamente a empresas privadas, lo cual sí se plantearía el «banco del BRICS».
Sobre ese asunto, la subsecretaria de Política de la cancillería brasileña, María Edileuza Fontenele, explicó esta semana que en la cumbre que se celebrará en Nueva Delhi no se anunciará formalmente la creación del banco, pero sí deberá formarse un grupo de trabajo que analizará la viabilidad «técnica» del proyecto.
Fontenle admitió que uno de los asuntos más delicados para ese proyecto sería la conformación del capital de la institución que se propone, pero apuntó que la voluntad política existe, pese a que los cinco países son conscientes de que «no será una discusión fácil».
En la IV Cumbre del BRICS también serán analizados otros asuntos de la agenda global relativos a la paz y la seguridad o la reforma de las instituciones multilaterales, entre otros temas, aunque la diplomática aclaró que los debates estarán centrados en lo económico y comercial.
Según el FMI, en 2012 los países del BRICS serán responsables por el 56 por ciento del crecimiento de la economía mundial, en tanto que los miembros del G7 (Alemania, Canadá, Estados Unidos, Francia, Italia, Japón y Reino Unido) aportarán solamente un 9 por ciento de esa expansión.
Ese creciente peso económico y un comercio en el interior del BRICS que en 2011 sumó 250.000 millones de dólares demuestran, según Fontenle, la tesis de que el centro de gravedad de la economía mundial ha dejado de estar en los países más desarrollados.
Tras la clausura de la Cumbre del BRICS, Rousseff se centrará en asuntos bilaterales con la India en el marco de una visita de Estado en la que está prevista la firma de acuerdos en las áreas de ciencia y tecnología, educación, igualdad de género y cooperación.
Junto con Rousseff viajan además unos sesenta empresarios brasileños, que participarán primero en encuentros del sector privado de los países del BRICS y luego en un seminario con representantes de decenas de compañías indias. EFE