11 mar (EFE).- El enviado de la ONU y la Liga Árabe para Siria, Kofi Annan, se mostró hoy «optimista» tras reunirse por segunda vez con el presidente sirio, Bachar al Asad, aunque reconoció que su misión de mediación es difícil.
«Va a ser duro y difícil, pero debemos tener esperanza», dijo Annan a los periodistas en Damasco antes de abandonar Siria sin lograr un acuerdo, pero «optimista por varias razones», según apuntó.
En su breve comparecencia, el mediador internacional explicó que presentó a Al Asad propuestas concretas para cesar la violencia y lanzar un diálogo «que tendrán un impacto real sobre el terreno».
Estas iniciativas «ayudarán a poner en marcha el proceso para salir de la crisis», aseguró Annan, quien resaltó la importancia de que el conflicto «no degenere aún más».
Anteriormente, una fuente de la ONU en Damasco, que pidió el anonimato, dijo a Efe que Annan «mantuvo una conversación muy franca y positiva con Al Asad, y se siente muy optimista de que va a lograr un avance».
Annan tiene previsto reunirse con miembros de la oposición siria en el exilio en su estancia en Doha, y, tras pasar de nuevo por El Cairo -donde comenzó su gira el pasado miércoles-, dejará la región, «aunque regresará a Damasco muy pronto», según la misma fuente.
El optimismo de Annan contrasta con la negativa que le expresó ayer Al Asad a cesar la represión mientras haya «grupos terroristas que trabajan para sembrar el caos».
El diplomático ghanés se reunió hoy previamente con los líderes de las comunidades religiosas en Siria, entre ellos el gran muftí Bader el Din Hasun, la mayor autoridad suní, y el patriarca de la Iglesia Greco-Ortodoxa, Zaka Iwas.
Ayer, Annan mantuvo entrevistas con los dirigentes del principal grupo de la oposición interna, Hasan Abdelazim y Abdelaziz al Jayer, así como con el histórico opositor sirio Luay Husein.
En declaraciones a Efe, Abdelazim insistió hoy en que los opositores a Al Asad no se sentarán a dialogar con el régimen si no se decreta un alto el fuego y cesa la violencia.
Para ello, Abdelazim cree que se debe dar un «ambiente adecuado para poder resolver la crisis».
«Cualquier negociación para una etapa de transición requiere primero un alto el fuego, el cese de la violencia y la liberación de los detenidos», ha subrayado.
Pese a estos llamamientos, la violencia sigue un día más en Siria, con la ofensiva de las Fuerzas Armadas contra la rebelde ciudad de Idleb, en el norte, donde milicianos del Ejército Libre Sirio tratan de oponer resistencia al avance militar gubernamental. EFE