5 mar (EFE).- La delegada de la Federación Filipina de Fútbol, Cristina Ramos, ha acusado al jugador hispanofilipino Ángel Guirado de «acoso sexual» por un incidente ocurrido minutos antes de un partido amistoso contra Malasia, indicaron hoy fuentes oficiales.
«Ramos ha denunciado a los jugadores Lexton Moy y Ángel Guirado y se ha abierto una investigación. Nos gustaría que esto no hubiera salido a la luz porque perjudica nuestra imagen», declaró a Efe el portavoz de la selección filipina de fútbol, Rick Olivares.
Cristina Ramos, hija del expresidente filipino Fidel Ramos y antigua integrante del Comité Olímpico Filipino, relató en una denuncia al Comité Disciplinario de la Federación Filipina de Fútbol que los hechos se produjeron cuando bajó al vestuario antes del partido contra Malasia celebrado en Manila el pasado 29 de febrero e inspeccionó una a una las acreditaciones de los jugadores.
«Cuando fui a comprobar la de Ángel Guirado, se levantó frente a mí vistiendo únicamente unos calzoncillos a propósito y no hizo ademán de ponerse unos pantalones cortos o de taparse. Los demás jugadores soltaron sonoras carcajadas», declaró Ramos.
Asimismo, aseguró que el jugador Lexton Moy se colocó a su lado cuando comenzó la inspección y exclamó: «¡Debe de ser una talla B!».
«Yo era la única mujer en el vestuario, por lo que debía de referirse a mi talla de sujetador», dijo Ramos.
Dan Palami, seleccionador nacional, que no estaba en el vestuario en ese momento, se excusó en un comunicado y señaló que «el acoso sexual no debe ser tolerado en ninguna situación», aunque atribuyó el incidente al nerviosismo de los jugadores.
«Por mi experiencia personal, la tensión y la energía nerviosa que hay en los vestuarios antes de un partido se traduce a menudo en bromas subidas de tono. Alguien que lo vive por primera vez puede verlo como una falta de respeto. Pero sólo hablo de mi experiencia personal», manifestó el entrenador.
Guirado no se ha pronunciado aún sobre la denuncia, ya que se encuentra en Nepal con el resto de la selección filipina para disputar un torneo de la Confederación Asiática de Fútbol.
El centrocampista, nacido en Málaga hace 27 años, ha jugado en clubes españoles como el Deportivo de La Coruña, el Levante, el Córdoba o el Vecindario, y desde hace un año se incorporó al combinado nacional filipino, del que es una de las máximas estrellas, gracias a que su madre es de este país.
El equipo nacional filipino cuenta con otro jugador de origen español, el gaditano Carli de Murga. EFE