28 feb (EFE).- La selección de Estados Unidos juega mañana en Génova su primer partido en territorio italiano desde 2002 ante el combinado nacional transalpino, que llega a la cita con un once titular muy marcado por las lesiones.
El seleccionador italiano Cesare Prandelli, con un rígido código ético, no quiere «chicos malos» en sus filas y por ello se cayeron de la convocatoria para este amistoso tanto el delantero del Manchester City Mario Balotelli como el oriundo argentino del Roma Pablo Osvaldo.
«Considero a Balotelli como el delantero centro titular de esta selección. Ahora tiene tres meses para demostrar que ha cambiado», dijo Prandelli, quien añadió en referencia a la expulsión de Osvaldo que rechaza «este fútbol de puñetazos a balón parado que son solo una señal de debilidad».
«Mis jugadores lo saben bien, quien escupe o reacciona golpeando no puede vestir la camiseta azzurra», agregó el seleccionador italiano. Por ello, decidió llamar al joven romanista Fabio Borini, de 20 años, quien hasta ahora había sido convocado solamente para la sub-21.
El entrenador italiano continúa con su rígido código a pesar de no poder contar con casi todos los delanteros importantes como Antonio Cassano y Giuseppe Rossi, lesionados desde hace tiempo, así como tampoco con el máximo goleador del campeonato, el jugador del Udinese, Antonio Di Natale, que se acaba de lesionar.
Contra el equipo que entrena el alemán Jurgen Klinsmann, también faltarán otros hombres importantes como el milanista Alberto Aquilani o el interista Andrea Ranocchia, ambos con problemas físicos.
Quien volverá a defender la portería azzurra será Gianluigi Buffon. También tendrá un hueco un jugador de la Segunda División italiana, el defensa del Torino, Angelo Obinze Ogbonna, quien ya debutó con la selección absoluta.
Por su parte, el seleccionador Jurgen Klinsmann eligió primero a 21 jugadores, pero se dieron las bajas por lesiones y enfermedad de Timmy Chandler, Jermaine Jones y José Torres, por tirones musculares, y de Landon Donovan con bronquitis.
Para ocupar sus puestos, Klinsmann ha llamado a Brek Shea, del F.C. Dallas, y a Sacha Kljestan, que milita en el Anderlecht, de Bélgica, aunque podía reclamar a algún jugador más de los que están en Europa.
Estados Unidos llega al partido en su mejor momento de juego desde que Klinsmann se hizo cargo del equipo tras haber conseguido tres triunfos consecutivos, dos a domicilio y uno de local, frente a Eslovenia (2-3), Venezuela (1-0) y Panamá (0-1), respectivamente.
A la larga lista de jugadores que el alemán ha llamado para jugar en la selección estadounidense, se une ahora Terrence Boyd, el delantero que juega en el Borussia Dortmund, que ya ha formado parte de la selección Sub-23 de Estados Unidos.
«Queremos que todos los jugadores que están en Europa vuelvan a la selección como sucedió cuando ganamos a Eslovenia», declaró Klinsmann. «Estoy entusiasmado de tener de nuevo a estos jugadores juntos y enfrentarnos a un gran equipo como es Italia, un campeón del mundo, y en su campo».
Alineaciones probables:
– Italia: Buffon; Abate, Barzagli, Bonucci, Chiellini; De Rossi, Marchisio, Montolivo, Pirlo; Giovinco, Matri o Pazzini.
– Estados Unidos: Howard; Spector, Goodson, Bocanegra, Cherundolo; Bradley, Edu, Kljestan, Dempsey; Buddle y Altidore.
Estadio: Luigi Ferraris (Génova)
Hora: 20:45 hora local (19:45 GMT). EFE