21 feb (EFE).- El artista mexicano Luis Miguel pidió tanques de oxígeno y más guardias de seguridad para presentarse en el Festival de Viña del Mar, mientras Morrissey y Salvatore Adamo se encuentran ya en Chile para actuar en el certamen que comienza mañana.
Luis Miguel llegará este miércoles en su avión privado al aeropuerto de Torquemada, en Viña del Mar, unos 125 kilómetros al noroeste de Santiago, informaron a Efe fuentes de su discográfica.
El llamado «Sol de México», esquivo con los periodistas, no atenderá a los medios ni dará la tradicional rueda de prensa previa a cada actuación que suelen ofrecer todos los artistas invitados al festival.
Luis Miguel llegará procedente de Punta del Este, donde deleitó a sus seguidores con un concierto y disfrutó del lujo de ese balneario uruguayo.
En Viña del Mar se hospedará en la suite presidencial del Hotel del Mar, de noventa metros cuadrados, con bañera con hidromasaje y una conexión directa a un comedor reservado, y que el año pasado albergó al británico Sting y al canadiense Paul Anka.
Pero el intérprete de «Romance» no quiere descuidar ni un solo detalle de su presentación en el escenario de la Quinta Vergara, adonde se subirá después del argentino Diego Torres, para cerrar la primera noche del festival.
«Llevamos cinco meses conversando con los representantes de Luis Miguel y todos los días nos siguen llegando requerimientos», cuenta el productor ejecutivo del festival, Eduardo Cabezas, publicó hoy el diario El Mercurio.
Según explicó, entre las últimas exigencias del cantante están que haya dos tanques de oxígeno en su camarín y que haya veinte guardias más, entre ellos diez mujeres, para impedir que el público le tome de cerca fotografías con flashes que puedan distraerle.
«Luis Miguel llega también con su propio director de televisión, porque quiere mostrar algunas sorpresas, y para todo eso, vamos a tener una dirección conjunta», añadió el productor.
Mientras Luis Miguel alimenta la expectación, hoy llegó a Santiago en un vuelo comercial procedente de Madrid el italiano Salvatore Adamo, que se presentará el viernes en el festival.
Además, este lunes arribaron a Chile los españoles Rosana y José Luis Perales, que ejercerán de jurado de la competencia internacional, pero también se presentarán ante la Quinta Vergara, la primera el domingo y el segundo, el lunes.
Por su parte, ayer arribó a Santiago, también en un vuelo comercial, el británico Morrissey, que salió a cenar a una conocida pizzería del barrio de Las Condes, en el este de la capital, y accedió a fotografiarse con algunos seguidores.
Según publica hoy el diario La Tercera, Morrissey, que permanecerá en Santiago hasta horas antes de su espectáculo del próximo viernes en Viña del Mar, solo pidió a los organizadores que no sea interrumpido por los presentadores durante su actuación. EFE