El Presidente de Perú instó al capturado cabecilla de Sendero Luminoso, Florindo Eleuterio Flores a la deposición de las armas.
Ollanta Humala sostuvo una breve charla con el cabecilla de ‘Sendero’ en la base militar de Santa Lucía, en la selva peruana, a donde llegó por la mañana para supervisar su estado de salud y las operaciones militares en marcha.
Según una nota de la Presidencia de la República, el gobernante tuvo un “breve encuentro” con “Artemio”, que se encontraba en la enfermería de la base, con las manos y el tórax vendado, “tras haber recibido las primeras atenciones médicas, bajo estrictas medidas de seguridad”.
“Luego de observar que su estado de salud era estable, (Humala) le dijo que el proceso judicial que se seguirá en su contra se hará con pleno respeto de sus derechos, pero que antes de enfrentar el juicio, primero se restablecerá su salud”, indicó la nota.
‘Artemio’ fue puesto a disposición del Ministerio Público y durante la visita que le hizo Humala estuvieron fiscales “que cumplieron con el deber de tomarle sus generales de ley.”
El fiscal de la Nación de Perú, José Peláez, afirmó hoy que la legislación del país establece que Florindo Flores, debe ser condenado a cadena perpetua.
Peláez aseguró que hay varios procesos abiertos en el Ministerio Público contra el cabecilla de ‘Sendero’ por diversos delitos que van desde el asesinato hasta la destrucción de la propiedad pública y privada. Actualmente el líder rebelde se encuentra en Lima internado en el hospital de la Policía Nacional.
El insurgente lucía demacrado:
Al ser conducido en una camilla hacia una ambulancia de la policía, ‘Artemio’ lució enfermo, con los brazos vendados, pero consciente, e incluso vociferó algunas palabras que no pudieron ser entendidas. Acto seguido levantó un puño hacia la zona donde se encontraban los periodistas. Se espera su recuperación para empezar el juzgamiento.