13 feb (EFE).- El Manchester United y el Dinamo Moscú han pedido a Antonio Valencia y a Christian Noboa, respectivamente, que no jueguen el próximo partido amistoso de Ecuador contra Honduras, reveló hoy el entrenador de la selección, Reinaldo Rueda, quien instó a los jugadores a que planten cara a sus equipos.
«Todos los clubes quieren el jugador solo para ellos y esa es la pugna, y el jugador queda en el medio, y ahí es donde el jugador debe imponerse (…). Hay que hacerse respetar, no solo para los partidos oficiales, sino para los partidos de selección, sea donde sean», afirmó el entrenador colombiano.
El Manchester United ha pedido a Valencia que descanse, en lugar de viajar a Guayaquil para el partido del 29 de febrero contra Honduras, mientras que el Dinamo Moscú quiere que Noboa use el tiempo para adecuarse al juego del equipo, al que fue traspasado hace menos de un mes, explicó Rueda.
El entrenador dio sus declaraciones en una rueda de prensa en la ‘Casa de la Selección’, en las afueras de Quito, donde desde hoy se entrena un combinado nacional formado por jugadores menores de 23 años.
Pero incluso en este caso no todos los clubes respondieron a su llamado, ya que se quedaron en Guayaquil tres convocados del Emelec, Marlon de Jesús, Enner Valencia y Fernando Gaibor, aunque sí llegaron los otros dos escogidos de ese equipo, Wilson Morante y Marlon Mejía.
El Emelec ha dicho a la selección que los tres ausentes están hoy «bajo valoración médica», según Rueda, quien también apuntó que comprende que el club tuvo un partido «dificilísimo» de Copa Libertadores el jueves pasado frente al paraguayo Olimpia, al que derrotó en Guayaquil.
Aún así, el entrenador afirmó que «el jugador de selección tiene que imponerse, hacer respetar esos espacios» y afirmó que la ausencia de los tres le obligará a cambiar su planificación.
«Es una pena por ellos, por el club, por nosotros, creo que perdemos todos con este tipo de situaciones», recalcó.
El grupo disputará el miércoles un encuentro amistoso contra un combinado de jugadores del Técnico Universitario y el Macará de la Primera División ecuatoriana en la localidad de Ambato, a unos 130 kilómetros al sur de Quito.
El objetivo es valorar a los jóvenes, algunos de los cuales Rueda adelantó que serán incorporados a la selección de cara a las eliminatorias del Mundial de Brasil 2014.
«Vamos a estar necesitando una u otra posición de estos jóvenes de gran proyección», dijo el entrenador.
Los jugadores son conscientes de que para ellos las prácticas y el partido de esta semana son una prueba que puede determinar su permanencia o no en la selección en el futuro.
«Nos sirve para mostrarnos, que el profe (Rueda) vea que estamos aptos para seguir en este proceso, mostrar hacia todo el país que somos un grupo de jóvenes que estamos dispuestos a dejar la camiseta en alto», afirmó José Francisco Cevallos.
El partido de Ecuador contra Honduras es la única cita de la selección antes de medirse en junio venidero contra Argentina y Colombia en las eliminatorias mundialistas.
Rueda admitió que él hubiera preferido que el equipo que dirige se enfrentara a una selección de mayor peso internacional que la del país centroamericano, pero dijo que no se pudo organizar porque ese tipo de encuentros lo coordinan empresas que se dedican a este fin.
En todo caso, Rueda auguró que el partido será «dificilísimo» y señaló que el reto de la selección es demostrar que puede ganar fuera de Quito, cuya altura de 2.800 metros supone una ventaja para los jugadores aclimatados a la escasez de oxígeno.
«Ecuador tiene que ser una selección que tenga igual o mejor comportamiento en el llano como en la altura», afirmó. EFE