Luis Chiriboga Acosta, presidente de la Federación Ecuatoriana de Fútbol, mencionó los principales puntos que se trataron en el Congreso. El máximo dirigente dijo que la decisión de que los derechos de televisión sean administrados por la F.E.F beneficiará a todos los equipos y futbolistas en Ecuador.
El presidente precisó que a partir del 2013, la FEF manejará los derechos de TV para el territorio del Ecuador y para el mundo entero. “En ningún momento hemos hablado del Canal del Fútbol” , aclaró el dirigente.
“Esta resolución que hemos tomado es en beneficio de todos, los ingresos ayudarán a todos los clubes”, sostuvo.
Sin embargo, no se tomó en cuenta que algunos de los equipos más populares del Ecuador, como Barcelona, Liga de Quito o Emelec, han firmado ya sus contratos con diferentes estaciones de televisón por varios años.
Por esta razón, habrá un verdadero problema con dichas estaciones, que exijirán indemnizaciones para rescindir dichos contratos.
En el seno de la Federación se trató este tema, por el cual se mencionó la posibilidad de que el canal que asuma los derechos televisivos sea el responsable de pagar estas idemnizaciones.
Las asociaciones provinciales, así como la mayoría de equipos de la Serie B, votaron a favor de esta decisión, por la cual, se dará un 20% de los ingresos a estos equipos.
Una de las críticas más efusivas en torno a este tema ha sido la de Rodrigo Paz, dirigente de Liga de Quito, quien explica que detrás de esta propuesta, hay manipulación por parte de la Federación Ecuatoriana de Fútbol.
Por esta razón, Liga de Quito dejará de respaldar las decisiones de la Federación. El directivo argumenta que varias asociaciones provinciales ni siquiera tienen equipos en competición, por lo que no tienen la capacidad para tomar decisiones, como los clubes que sí tienen una larga trayectoria en el fútbol nacional.
Además, en el seno de la Federación, se dijo que esta decisión incluso puede ser inconstitucional, ya que ya hay una ley antimonopolio, que impide este tipo de acciones.
A lo largo de este año se debatirá este polémico tema, por el que sin duda, los equipos grandes se verán muy perjudicados. La lucha se enciende no sólo en las canchas, sino también fuera de ellas. Está que arde.