Sin duda, Barcelona cierra uno de los años más exitosos de su historia. En 2011, el conjunto blaugrana ganó la Champions League, la Liga Española, la Copa de España, además de alzarse con el Mundial de Clubes.
A comienzos del año, Lionel Messi ganó el segundo Balón de Oro de su carrera. El crack argentino se convertía, de esta manera, en el jugador más joven en alzarse con este trofeo dos veces consecutivas.
En fecbrero, Josep Guardiola llegó a su partido de Liga número 100 como técnico del primer equipo, con un balance genial de 79 victorias, 14 empates y sólo 7 derrotas, las mejores cifras que nunca ha presentado un entrenador del FC Barcelona en su centenario.
No todo fue color de rosa en el equipo catalán. A media temporada el equipo recibió una terrible noticia: Éric Abidal tenía un tumor en el hígado. El francés, que finalmente se recuperó en un tiempo récord y pudo reincorporarse a la dinámica del equipo, sirvió de enorme motivación para el resto de sus compañeros.
El quinto mes del año fue inolvidable. El día 11, el equipo catalán empató 1-1 en Levante y se adjudicó la tercera Liga consecutiva.
17 días más tarde, en Londres, el FC Barcelona impartió una lección de fútbol y se impuso con un contundente 3-1 ante Manchester United y se alzó con la ‘Orejona’ de la Champions League.
En julio, el chileno Alexis Sánchez fue presentado como refuerzo para encarar la siguiente temporada. El chileno, que llegó procedente del Udinese por 26 millones de euros, no deferaudó al estratega Guardiola, y con el pasar de los meses, se consolidó como pieza clave del conjunto culé.
En agosto, los blaugranas vencieron en la final de la Supercopa Española, y a finales de año, levantaron la Copa del Mundial de Clubes tras vencer a Santos de Brasil. Sin duda un año para recordar. Barrieron con enorme sobriedad.