Vie. Nov 22nd, 2024

A pesar del paso del tiempo, la venta de caretas sigue siendo una tradición muy arraigada para los quiteños, que a dos días de que finalice el 2011 adquieren este accesorio, para usarlo de forma personal o para adornar las viejos que se quemarán para despedir este año.
Máscaras, pelucas, lluvias de estrellas y los años viejos llenan de color varios puntos a lo largo de la ciudad.
A pesar de la variedad de lugares donde se ofertan los singulares artículos, los quiteños tienen sitios tradicionales donde acuden cada fín de año para adquirirlos.
Sin lugar a dudas, uno de estos sitios es ‘El Palacio de la Careta’, cuya trayectoria es de 40 años recien cumplidos este 2011, ya que fue en 1971, cuando su propietario, Vicente Paredes, empezó con su particular oficio de caretero.
A pesar que en sus inicios, las caretas de papel eran las que se comercializaban, el local no ha dejado de innovarse. Manos y pies de caucho, trajes hechos a la medida, prótesis de bustos, son algunos de los objetos que se comercializan.
En la tienda, no se venden años viejos, no obstante su dueño aseguró que los realiza bajo pedido.
Entre las caretas de caucho que más salida tienen en el local, hay modelos nuevos, entre los que están ‘Goku’ de los Dragon Ball Z, Shrek, gladiadores y algunos modelos de terror entre los que predominan diablos, lobos, minotauros y monstruos.
Don Vicente señala que un elemento que ha contribuído para el éxito del local, es la lealtad de la gente, además que son fabricantes de sus productos.
‘Mientras Dios me ofrezca vida, hay Vicente Paredes para rato. Mientras la gente siga apoyando este trabajo, habrá ‘Palacio de la Careta’ por largo tiempo’ Vicente Paredes, expresó propietario del ‘Palacio de la Careta’

Pero, las calles también son un punto donde la mayoría de la población adquiere los mismos.

Pedro Casamen, cada diciembre por más de una década ha instalado su puesto de caretas y viejos en la América y Acuña.
En el sitio comercializa máscaras de cartón, de caucho, volcanes, estrellitas toreras y años viejos pequeños de aserrín.
El comerciante indica que el no es fabricante de estos productos, sino que los adquiere en Saquisilí pero que aún así, posee una nutrida clientela.
Sin embargo, si la venta de las caretas no baja con el paso de los años, no ocurre lo mismo con los viejos, que según el vendedor minorista, cada año es más difícil, pues la gente opta por los que son fabricados en papel.
Políticos en el olvido
IEntre los más vendidos este año, están Rafael Correa, Fernando Cordero, Ramiro González y Augusto Barrera. Según los comerciantes, no han habido cambios en los personajes desde el año anterior. Un elemento un poco extraño pues cada año hay políticos que por su papel, se convierten en protagonistas de la última noche del año.

Por adm