La Policia Nacional realizó una inspección en cada uno de los puestos del Mercado Iñaquito, para verificar que tengan todos los permisos de funcionamiento en regla.
En el operativo, 21 locales fueron clausurados, no solo por no tener los papeles necesarios, sino porque en algunos de los mismos se decomisó licor caducado y sin los comprobantes de los pagos de aranceles.
Los efectivos policiales procedieron a botar el alcohol en las alcantarillas, ubicadas en las afueras del mercado.
Este es el segundo controlque se realiza en Inaquito.
En el que fue realizado anteriormente, muchos de los comerciantes optaron por romper ellos mismos las botellas antes de que estas fueran incautadas por los miembros de la policía.
Según la Intendencia de Pichincha, la entidad ha realizado tres reuniones con los comerciantes, indicándoles sobre la documentación que deben tener y que la misma debía estar al día para evitar estos inconvenientes.
Además de la clausura, los minoristas deberán cancelar una multa de 100 dólares y presentar su documentación actualizada. A pesar de que este operativo estuvo acompañado de reclamos y la molestia de muchos de los vendedores, no se registraron actos violentos por parte de los vendedores.
Autoridades de la Intendencia de Pichincha aseguraron que estos controles se llevarán a cabo en siete mercados más del Distrito. En los mismos seguirá participando la Policía Nacional, ya que en el anterior control en el Mercado Iñaquito, los comerciantes agredieron a las autoridades, cuando les decomisaron la mercadería fraudulenta
