El campeonato está al rojo vivo. El traspié del Deportivo Quito en Riobamba y los brillantes triunfos de Liga y Emelec estrecharon la tabla, instalando un inminente peligro para el líder del campeonato, que ha bajado su nivel de juego y productividad.
El once de Ischia se salvó milagrosamente de una nueva derrota. La falta de seguridad y precaución de los jugadores de Dragan Miranovic permitió el gol salvador de Fidel Martínez, cuando los agujas del reloj corrían entre la desesperación y la impotencia del once azulgrana, que extraña la cuota de gol de Maximiliano Bevacqua, desaparecido del mapa desde hace cinco partidos. Justo se le se se le mojó la pólvora en el momento clave del campeonato. Los chullas sufren para sumar puntos. Y poco a poco van reduciendo la ‘caja de ahorros’, en la que 10 puntos parecían marcar una clasificación sin apuros para jugar la final del campeonato, frente a Emelec, que revivió de urgencia en esta segunda etapa y ya ocupa el segundo casillero, a escasos 6 puntos de diferencia. La mano de JR Carrasco, resistida a muerte por la hinchada millonaria, comienza a arrojar dividendos.
Liga no se queda atrás. Bajo el influjo del talento de Ezequiel González y los goles del ‘Pirata’ Hernán Barcos, la primera figura de este campeonato, el equipo del ‘Patón’ levanta la mano.
Para la ‘U’ fue una semana redonda. Ganó en Guayaquil, un partido difícil, con 10 hombres y con el marcador en contra, fabricando una gesta memorable.
El domingo paseó al Deportivo Cuenca en Ponciano. Lo goleó a placer, después de un comienzo errático en el que inclusive tomó un gol en contra. El equipo está en vena. Para objetivos grandes. Respondiendo a la jerarquía de una institución que brilla en el ámbito continental con luz propia. Se puso lindo el campeonato. Afloran los nervios y la imperiosa necesidad de ganar. Al parecer, Barcelona se cayó de la nube. Nadie tenía en los cálculos, dos derrotas en los minutos finales. El pueblo amarrillo está desconsolado y ya han comenzado el reparto de responsabilidades ante el potencial fracaso. Guayaquil es un hoguera de descontento.
* A seis fechas del final, la segunda etapa es un acertijo. Emelec busca nuevamente el primer lugar. Asi ganaría directamente el título 2011
Por: Raúl Cruz Molina
