La presidente Cristina Fernández fue reelegida con uno de los mayores márgenes de victoria. Rompió récords en el país.
Poco después de conocerse los primeros resultados de las elecciones presidenciales de Argentina, la jefa de Estado de ese país, la peronista Cristina Fernández de Kirchner, reelecta con el 53% de los votos, ha convocado a la unidad nacional ante un mundo altamente complejo.
Argentina aún no ha sufrido la nueva crisis de EE UU y la Unión Europea, pero toda Latinoamérica está preparándose para crecer menos de lo que lo venía haciendo hasta ahora.
“Yo les digo a todos los argentinos que siento la inmensa responsabilidad de llevar adelante y conducir a la República Argentina a que viva una historia diferente a la que nos tocó vivir en el pasado”, dijo Fernández en un discurso con la voz quebrada ante cientos de militantes que llenaron el auditorio del hotel Intercontinental de Buenos Aires.
Mientras tanto, en la Plaza de Mayo, decenas de miles de manifestantes cantaban y bailaban para celebrar su triunfo.
En diversos pasajes de su discurso, Fernández recordó a su marido y antecesor en el cargo, Néstor Kirchner, que falleció hace casi un año.
El candidato socialista a presidente, Hermes Binner, también festejó porque no ganó, pero acabó segundo pese a que su fuerza, el Frente Amplio Progresista (FAP), nació hace pocos meses.
Tras felicitar a Fernández, Binner se dirigió a ella frente a sus militantes: “Quiero recordarle que esta fuerza es la segunda en Argentina. Ejerceremos una oposición responsable” puntualizó.