El mexicano José Alberto Vargas, un joven de 16 años con muy poco tiempo de experiencia en la disciplina del trampolín, apenas quería hacer un buen papel como representante de su país en los Juegos Panamericanos de Guadalajara 2011 y terminó con un bronce inédito para México en esta prueba.
Vargas, tercero en la prueba individual de trampolín masculino, apenas quedó atrás del canadiense Keegan Soehn, y del brasileño Rafael Almeida, quienes con años de experiencia, lograron oro y plata, respectivamente.