Los vehículos escolares deben pasar las revisiones de las respectivas entidades de control para poder transitar sin problema.
A partir de ayer se intensificaron los controles de tránsito en toda la urbe. La medida es implementada por la Policía Nacional y el Municipio de Quito, con la finalidad de resguardar la seguridad de los niños y jóvenes que acuden a sus respectivos planteles educativos desde el pasado lunes.
Por ello, los conductores de los buses escolares deben contar con todos los sellos de revisión del caso para evitar sanciones de carácter económico.
Esto lo confirma la Vice Alcaldesa de la ciudad, María Sol Corral, quien indicó que por precaución los padres de familia no deben permitir que automotores que no hayan sido debidamente aprobados por la Corporación para el Mejoramiento del Aire (Corpaire), el Cabildo Metropolitano y la Policía, puedan trasladar a sus hijos hasta las diferentes entidades educativas.
Corral aclaró, que para identificar cuales son los vehículos que pueden circular sin problema, es necesario constatar que tengan los sellos de la Empresa de Movilidad y Obras Públicas, de la Corpaire, y el número de pasajeros que puede transportar dicha unidad. Señaló además, que en caso de que los buses no cuenten con estas garantías los ciudadanos tienen la posibilidad de denunciar el hecho. Al momento varios transportistas escolares acuden diariamente a los centros de revisión de Quitumbe, al sur y Carapungo, al norte, para obtener los permisos respectivos.
Frenos y llantas deben estar a punto
En las revisiones vehiculares que se realizan en Quitumbe y Carapungo, en lo que más se hace énfasis es en el chequeo de las llantas y en el desgaste de las zapatas de los frenos. Según información del cabildo, estos dos elementos del transporte escolar deben estar en perfecto estado, caso contrario pueden arriesgar la vida de los pasajeros.