El gremio de los transportistas decidió cancelar la decisión de suspender actividades previstas para ayer.
El presidente del gremio, José Zapata, afirmó que la medida de hecho no fue suspendida por amenazas del Gobierno, sino por acuerdos.
Después de mantener una reunión en Guayaquil con José Serrano, ministro del Interior; Doris Solís, ministra Coordinación de la Política; María Ángela Duarte, ministra de Transporte y Obras Públicas y Héctor Solórzano, director de la Agencia de Tránsito, los dirigentes aceptaron un acuerdo que garantiza frenar la informalidad del servicio de transporte.
La decisión se tomó luego de que el presidente Rafael Correa anunció que declararía estado de emergencia y mandaría confiscar unidades vehiculares y retirar incluso los permisos de operación a las cooperativas que participen de la medida de hecho, para garantizar la movilidad de los usuarios.
Zapata negó que hayan retrocedido por estas advertencias, reiterando además que la resolución adoptada en un principio por la Federación de Transportes del país se apegaba a la Constitución Política del Estado, que garantiza el derecho a la resistencia.
Entre lo acordado esruvo la remoción del director de la Agencia de Tránsito de Esmeraldas.