La molestia de los habitantes es inminente ante la falta de agilidad en los trabajos de ese acueducto.
El colector de agua de la quebrada San Martín ubicada en el barrio de San Bartolo, al sur de la ciudad, está causando malestar a todos los pobladores de la localidad, porque hace algunos meses se dañó y provocó que se forme una piscina de aguas servidas.
Lo preocupante del hecho es que los niños juegan a diario en este sitio, ya que no existe un espacio verde que les permita realizar actividades deportivas.
Los moradores cuentan, que gracias a una minga barrial se logró construir una cancha de fútbol improvisada. Sin embargo, están inquietos, porque los olores que emite el pozo séptico que se formó a pocos metros de la cancha, son nauseabundos y esto ha provocado enfermedades en los infantes.
“Todo empezó cuando las lluvias fueron constantes en la ciudad. Al principio, el colector se hundió un metro. Conforme pasó el tiempo, la situación empeoró, porque se formó una especie de lago, que se convirtió en un problema. El olor es horrible”, aclara Ismael Felícita, habitante de la zona.
Por su parte, Amada Cañaveral, vecina del lugar, manifiesta que ya ni siquiera se puede abrir las ventanas en cada una de las viviendas, porque cuando el sol se vuelve intenso, el ambiente se torna pestilente. Añade, que como consecuencia de este inconveniente, algunos lugareños han sufrido enfermedades en la piel y han soportado molestosas alergias.
Solicitan agilidad en la reparación
Los moradores de esa zona del sur capitalino, señalan que la Empresa de Agua Potable y Saneamiento se ha hecho presente para solucionar el problema que tienen con el pozo séptico.
Piden que se agiliten los trabajos, ya que las modificaciones avanzan a paso lento por lo que hasta el momento no se observa ninguna mejoría.